MANIFIESTO DE LA MESA DIOCESANA DE MIGRACIONES - RED INTRAECLESIAL

“No me llames extranjero, mírame bien a los ojos… y verás que soy una persona…”

Las organizaciones abajo firmantes, miembros de la RED INTRAECLESIAL de la Diócesis de Canarias, ante la dramática situación que viven las personas migrantes y refugiadas dentro y fuera de las fronteras europeas, han realizado una reflexión y acordado una posición común por lo que

DENUNCIAMOS QUE:

• En 2017 el número de personas desplazadas supera los 65 millones, y que los fallecidos en travesía hacia Europa se cuentan por miles.
• El origen y las causas de los movimientos migratorios forzosos son las guerras, el hambre, el terrorismo, la violencia y el expolio de las riquezas de sus países.
• Casi la mitad de los desplazados son menores no acompañados, de los cuales más de 10.000 han desaparecido al rebasar las fronteras europeas.
• Las migraciones forzosas y medioambientales seguirán aumentando en las próximas décadas.
• La externalización de las fronteras europeas es causa de sufrimiento y vulneración sistemática de los Derechos Humanos y da lugar a violencia física, psicológica, violaciones, vejaciones y esclavitud.
• Es inaceptable que la UE ampare, mediante acuerdos y/o pasividad, prácticas inhumanas como las que hoy son noticia en países como Libia, ya que las políticas de cooperación son en realidad políticas de represión en África.
• España es uno de los Estados más restrictivos para conceder el estatus de refugiado a las personas que huyen de conflictos armados, lo que ha provocado que muchas personas se encuentren como “migrantes en situación irregular” en nuestras calles.

Ante la pasividad e indiferencia de los líderes mundiales para dar respuesta integral al sufrimiento evitable de miles de personas

EXIGIMOS a las autoridades españolas y europeas que:

1. Las personas desplazadas forzosas que lleguen a nuestras fronteras tengan una acogida digna y una protección adecuada y respetuosa con los Derechos Humanos, especialmente las más vulnerables.
2. España cumpla cuanto antes el compromiso de acoger a 17.337 personas refugiadas.
3. Lleven a cabo el cierre de los CIEs –Centros de Internamiento de Extranjeros- y refuercen los recursos y el sistema de acogida para que sea flexible, sostenible, y permita la verdadera integración de las personas.
4. Garanticen el acceso a los procedimientos administrativos de entrada, devolución y protección internacional y el asesoramiento jurídico adecuado.
5. Impulsen una Ley Integral contra la discriminación y otra Ley de protección de víctimas de delitos de odio.
6. Recuperen los fondos de Cooperación al Desarrollo y Educación al Desarrollo.

NUESTRO COMPROMISO es trabajar por:

• Poner en práctica acciones directas y específicas para ACOGER, PROTEGER, PROMOVER e INTEGRAR a las personas migrantes que sufren las causas de la movilidad forzosa. 
• Colaborar con otras organizaciones a tender puentes en defensa de la dignidad de las personas, ofrecer una respuesta amplia y generosa de acogida y acompañamiento de quienes quedan fuera del sistema, solicitantes de asilo y refugiados sin protección que ya están aquí, o personas migrantes que llegan hasta nuestras comunidades eclesiales. 
• Hacemos nuestro el mensaje del Papa Francisco: ”Para obtener los resultados esperados es imprescindible la contribución de la comunidad política y de la sociedad civil, cada una según sus propias responsabilidades, pues se necesitan soluciones permanentes tanto en los países de origen como en los países de tránsito y acogida”. Para su consecución propone impulsar los pactos mundiales que aprobará la ONU en 2018 como marco de referencia: uno, para lograr una migración segura, ordenada y regulada; y otro sobre refugiados, en orden a desarrollar propuestas políticas y poner en práctica medidas concretas.

FIRMADO: Secretariado Diocesano de Migraciones, Cáritas diocesana, CONFER, Proyecto Daniela, Religiosas Oblatas, Escuela de Formación Sociopolítica, Secretariado de Misiones, Grupos diocesanos de Solidaridad, Secretariado de Juventud, Patio de Las Culturas, “No Violencia 2018“, Movimiento Cultural Cristiano, Franciscanas Misioneras, Asociación Movimiento Junior, Secretariado de Pastoral Familiar, Manos Unidas, Centro Sagrado Corazón de Balos, Centro Loyola y Comunidades de Vida Cristiana.